Entradas

Mostrando entradas de enero, 2010

Despedida

Más de una vez he sentido que algun verso de Benedetti puede expresar mejor lo que yo misma siento, por eso este poema tiene un lugar especial en este blog... Chau número tres Te dejo con tu vida tu trabajo tu gente con tus puestas de sol y tus amaneceres. Sembrando tu confianza te dejo junto al mundo derrotando imposibles segura sin seguro. Te dejo frente al mar descifrándote sola sin mi pregunta a ciegas sin mi respuesta rota. Te dejo sin mis dudas pobres y malheridas sin mis inmadureces sin mi veteranía. Pero tampoco creas a pie juntillas todo no creas nunca creas este falso abandono. Estaré donde menos lo esperes por ejemplo en un árbol añoso de oscuros cabeceos. Estaré en un lejano horizonte sin horas en la huella del tacto en tu sombra y mi sombra. Estaré repartido en cuatro o cinco pibes de esos que vos mirás y enseguida te siguen. Y ojalá pueda estar de tu sueño en la red esperando tus ojos y mirándote.

Me Cansé

Ya me conozco de memoria cada una de mis falencias, ya sé cuan imperfecta soy y me siento orgullosa. Ya no me interesa ser lo suficiente para alguien o algo, nunca lo voy a ser, nunca voy a tener nada más que entregar que mis miedos, mis silencios, mi nostalgia, mis recuerdos… mi inestabilidad y mi desesperante sentimentalismo. Así soy yo y ¿Qué?. Me cansé de que siempre se espere algo de mí ¿No lo ven? ¿No lo entienden? Soy esto que está aquí y nada más, no tengo nada que ofrecer, dejen de repetir la lista de lo que hace falta ¡Porque no me importa!. Me da igual ser una “niñita”, una “inmadura”, me da igual si me contradigo, si me falta carácter, si les parezco egocéntrica o arrogante o si les parezco el ser más débil de la tierra… me da igual si no creen en mi ¡No me importa!. Solo quiero estar tranquila, en paz conmigo misma, y si por ser como soy me voy a quedar sola, entonces tengo a la única persona en el mundo a la que le puedo importar: me tengo a mi misma, y con eso es suficie

Entre Mario Y Julio

Anoche dormí entre versos de Mario Benedetti y Julio Flórez. Soñé que estaba en una plataforma en medio de un estanque, de aguas turbias y allí arrojaba cosas que creía importantes pero que a la larga no me han servido de mucho… Anoche me entregaba a mis recuerdos y a mis nostalgias, anoche andaba con mis melancolías abiertas y mis tristezas de frente. Esa melancolía que me viene como una ola, que me tumba, que no miro, que no prevengo… me viene y me tumba… De repente todo es más difícil, todo se complica, todo me duele más, y me llegan esos recuerdos de aquello que no cerré, que no dije, que no miré, de aquello a lo que no le presté atención… de repente siento que todo me pesa, que no tengo calma… de repente siento que no sueño, que no hay nada. Mario repitió “Las paredes se van/ queda la noche/ las nostalgias se van/ no queda nada” y Julio me dijo “Y en todo instante, es tal mi desconcierto,/ que, ante mi muerte próxima, imagino/ que muchas veces en la vida...he muerto”. Luego dormí,

Esta va por mi… ¡Salud!

Y se nos fue un año más, uno que al menos yo no olvidaré tan fácilmente, que me trajo muchas alegrías y un buen tanto de tristezas, que me trajo triunfos y derrotas, que me movió de aquí para allá como hoja al viento, un año que me dejó como regalo muchas lecciones, una vida que hasta ahora empieza a pertenecerme de verdad, unas sensaciones jamás experimentadas, unos lugares que difícilmente serán olvidados, y conversaciones tan inesperadas como amenas. ¡Ay querido 2009! Te quise y te odié al tiempo y aun así todavía te lo agradezco todo pero me alegra también que te hayas ido… Me dejaste con tantas sensaciones y con un vacio que espero el 2010 llene. Así que por todo lo vivido en el año que se acabó, por cada palabra tanto las que alegraron como las que sentí que me destruyeron, por cada abrazo, por cada beso, por cada mirada, por cada paso que di, ¡voy a brindar! Total, cuando me despido no acostumbro a mirar atrás.